¿Para qué sirve la antigüedad en el trabajo?

El tiempo que el empleado lleva trabajando en una empresa no solo sirve para calcular la indemnización por despido, también es importante en otros casos.

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Desde el primer día en que el trabajador empieza a trabajar en la empresa, empieza a acumular antigüedad. También el periodo de prueba debe incluirse a la hora de calcular la antigüedad. Igualmente, si el empleado ha tenido varios contratos, se suman para obtener la antigüedad.

Como decíamos, la antigüedad se tiene en cuenta para muchas situaciones en las relaciones laborales, entre las que están:

• La indemnización por despido: Cuanto más tiempo se ha trabajado, más indemnización tiene derecho a recibir el trabajador. En concreto, cuando el despido es objetivo o por ERE, la indemnización es de 20 días por año trabajado; mientras que si se declara despido improcedente es de 45 días por año trabajado hasta el 12 de febrero de 2012 y de 33 días por año trabajado a partir de esta fecha.

• El plus de antigüedad: el también llamado complemento personal de antigüedad es una cantidad que se recibe en el salario por llevar un cierto tiempo en la empresa pero debe estar reconocido en el convenio colectivo para que el empleado pueda cobrarlo. Se paga por trienios, cuatrienios o quinquenios. No obstante, es un concepto salarial que ya no es habitual.

• Las excedencias: para solicitar una excedencia voluntaria es necesario tener al menos un año de antigüedad.

• Los ascensos: para conseguir un ascenso la empresa debe tener en cuenta la antigüedad, así como la formación y los méritos del empleado. En algunos convenios se describe cómo computa la antigüedad para los ascensos.

• Las pagas extra: algunos convenios colectivos establecen que se debe incluir la antigüedad para el cálculo de las pagas extra.

• Los traslados: los trabajadores con más antigüedad tienen preferencia para no ser trasladados si no hay acuerdo ante un caso de movilidad geográfica.

• El preaviso en una baja voluntaria: algunos convenios colectivos recogen que se debe de dar un preaviso mayor o menor en función de la antigüedad.

• La elección de vacaciones: los trabajadores con más antigüedad tendrán preferencia para elegir las vacaciones cuando no todos los empleados puedan pedirlas cuando deseen.

• El orden para los despedidos: algunos convenios establecen que si la empresa debe despedir personal, se debe hacer siguiendo el orden de menor antigüedad. Es el caso del convenio de Contact Center.

¿En qué casos se conserva la antigüedad?

En algunas situaciones puede surgir la duda de si el empleado conserva o no la antigüedad. En los siguientes casos, se conserva:

• En las subrogaciones: la empresa que subroga al trabajador debe mantenerle en su puesto con todos los derechos que él tenía, incluida la antigüedad.

• Cuando se contrate a un trabajador despedido: se tienen en cuenta el número de días que ha pasado entre el despido y la nueva contratación para saber si ha perdido la antigüedad. Algunas sentencias consideran que la relación laboral no se ha rota si no han pasado 20 días aunque otras lo amplían a 60 días. Sería necesario estudiar cada caso.

• Cuando se esté en situación de excedencia: tanto si se trata de una excedencia de cuidado de hijos o una excedencia forzosa, el tiempo de la excedencia se tiene en cuenta para la antigüedad, algo que no ocurre con las excedencias voluntarias.

¿Qué hacer si la antigüedad no es correcta?

Para saber la antigüedad que la empresa reconoce al empleado basta con mirarlo en la nómina, ya que normalmente suele aparecer.

En el caso que la antigüedad reconocida no fuera correcta, el empleado puede tomar medidas ante el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación y posteriormente, ante el Juzgado de lo Social.

Para acabar, apuntar que la antigüedad es un derecho del trabajador y no puede renunciar a ella, ni mediante pacto individual o colectivo.

El contenido de esta publicación es meramente informativo, por lo que si deseas realizar cualquier actuación en base al mismo, deberás contactar con el equipo de nuestra gestoría para poder llevar a cabo un asesoramiento personalizado.